EL AFILADOR: ¡Por Cristo, que bruja aparentas!
LA MOZUELA: ¡Yo lo soy! Beberé? tu sangre y tu? beberás la mía.
EL AFILADOR: ¡Vaya un sacramento! Perdona, niña si me relajo, pero ya estoy con soguilla.
LA MOZUELA: ¿Casado eres?
EL AFILADOR: Los dichos tengo tomados en Santa María de Todo el Mundo.
LA MOZUELA: ¿No te hayas capaz para beber mi sangre y darme a beber la tuya?
EL AFILADOR: La cabeza, niña, me has mareado.
LA MOZUELA: ¿Sabes lo que es una ligazón?
EL AFILADOR: Algo se me alcanza.
LA MOZUELA: ¿Y estás propicio?
EL AFILADOR: Para cuando ordenes.
LA MOZUELA, con gesto cruel, que le crispa los labios y le aguza los ojos, se clava las tijeras en la mano y oprime la boca del mozo con la palma ensangrentada.
LA MOZUELA: ¡Besa! ¡Muerde! ¡Ligazón te hago!
EL AFILADOR: ¡Vaya un arte de enamorar el tuyo!
LA MOZUELA: Descúbrete el hombro. ¡Me cumple beberte la sangre!
EL AFILADOR: ¿Profesas de bruja?
LA MOZUELA: ¡De bruja con Paulina!
EL AFILADOR: ¡Pues no me arredro!
LA MOZUELA:Pues entra a deshacerme la cama.
El errante se descuelga de la rueda y mete la zanca por el ventano. Apaga la luz de la alcoba LA MOZUELA. Un bulto jaque, de manta y retaco, cruza el campillo y pulsa en la puerta. Rechina el cerrojo. Se entorna la hoja, y el bulto se cuela, furtivo, por el hueco. Agorina un blanco mastín sobre el campillo de céspedes. Cruza LA MOZUELA por el claro del ventano. Levanta el brazo. Quiebra el rayo de luna con el brillo de las tijeras. Tumulto de sombras. Un grito y el golpe de un cuerpo en tierra. Tenso el silencio. Por el hueco del ventano, cuatro brazos descuelgan el pelele de un hombre con las tijeras clavadas en el pecho. Ladran los perros de la aldea.
«Ligazón»
Ramón María del Valle-Inclán
Entrenamiento para actores que quieran ampliar sus registros expresivos.
Ejercicios técnicos, físicos y expresivos para acceder a estados menos habituales
El actor frente a situaciones imaginativas fuera de lo común.
Humanizar comportamientos extremos y excesivos.