Señorita Julia

Obra de August Strindberg.


Sinopsis

Nuestra actualidad, con las interminables y cruentas guerras políticas, religiosas, sociales, económicas, culturales, sexuales familiares o incluso personales nos muestra que el sistema tiende, una y otra vez, a excluir a unos y a proteger a otros. Cuando los excluidos se vengan o son vengados por otros se perpetúa la tragedia del sistema. Para la «Señorita Julia», su familia y su clase social, la mezcla con la clase baja significa: deshonor, caída, humillación. Los pobres están excluidos de este sistema familiar y social. Juan y Cristina, sus familias y su clase social, ven en sus amos a sus verdugos. Acercarse a ellos es traicionar a sus ancestros.

Pero el hechizo de la Noche de San Juan y la irresistible atracción que sienten Julia y Juan hará estallar la guerra: la pasión luchará contra las oscuras fuerzas de dos destinos sociales irreconciliables. El misterio que rige sus voluntades, ¿es deseo de expiación?
¿Signo de locura? ¿La posibilidad de ser finalmente dueño de algo, de la propia muerte…? ¿O seguir inevitablemente a los muertos, como única manera de hallar la paz, el amor y el perdón? Es nuestro deseo que esta función estimule preguntas que nos acerquen a una mejor comprensión del ser humano.

Espectáculo producido por P.T.C. Producciones y subvencionado por la Consejería de Cultura de la Comunidad de Madrid y por El Ministerio de Educación y Cultura.
Estrenada en Noviembre de 2000. Gira por las principales ciudades de España.

Señorita-Julia-Sample

Ficha artística y técnica

Intérpretes:

  • Alicia Borrachero
  • Javier Albalá
  • Catalina Lladó

Dirección:
Juan Carlos Corazza

Traducción y Adaptación:
Gabriela Roy. María Ruiz de Apodaca

Versión:
Juan Carlos Corazza. Ana Gracia

Música:
Joan Valent

Vestuario:
Cornejo

Escenografía, Iluminación y Vestuario:
Jean Guy Lecat

Señorita-Julia-Cartel

“Todo es extraño en general. La vida, los hombres; todo es igual a un bloque de hielo, arrastrado de un lado a otro sobre la superficie del agua, hasta que se hunde, se hunde…»

– August Strindberg